La disciplina es el camino, pero es una parte imprescindible y un objetivo también. Solo se pueden lograr objetivos a través de esa disciplina.

El problema viene cuando llegan los mercachifles, estafadores e "iluminados" que te prometen el objetivo, sin el camino que lleva al mismo.

Los que te prometen aprender un idioma en dos semanas, los que te aseguran que perderás 10 kilos de grasa en un mes, los que te venden la iluminación en tres meses en cómodas cuotas mensuales.

Y no. Las cosas en este universo no salen "gratis". Todo requiere un esfuerzo orientado a conseguir un objetivo. No se pierde peso sin cambiar hábitos y sacrificarse. No se aprende un idioma sin esfuerzo. No se consigue dominar una disciplina sin tiempo, perseverancia y esfuerzo.

El problema es que la gente quiere el resultado y nada mas. Pongamos un ejemplo "remotamente" relacionado: El Tameshigiri

Para nada relacionado con "yoga" aparentemente. Es el arte japonés del "corte" con espada (con katanas en realidad) donde un experto puede cortar de manera aparentemente fácil media docena de troncos de bambú envueltos en esterillas mojadas. Eso equivale a cortar a un hombre con armadura de cuero y tela por la mitad de un golpe.

¿Como lo hacen, con una espada muy muy afilada? Si obviamente, pero también porque llevan años dominando la "disciplina". Como acumular correctamente la fuerza, como dominar su estado mental para dirigir esa fuerza correctamente en el ángulo adecuado, etc.

Eso se consigue con cientos, miles de horas de practicas. Muchas de ellas repetitivas y "aburridas". Un maestro en ese arte puede cortarte por la mitad una manzana sin rayar una mesa de laca sobre la que esté esa manzana. Fuerza, control, delicadeza, disciplina

Es básicamente lo mismo. La persona entrena su cuerpo y su mente para alcanzar un dominio sobre la misma. Un artista marcial es el equivalente guerrero de un yogui. En Asia no son raras las combinaciones de ambos. El objetivo siempre es el mismo: La claridad y serenidad mental y el dominio del cuerpo.

Pero la disciplina es una parte imprescindible. Un yogi no domina su arte sin esfuerzo y miles de horas de entrenamiento. La meditación es también una parte de muchas disciplinas marciales, a menudo bajo las apariencias mas extrañas.

El "camino de la espada" no es ajeno a ello (por cierto, Kendo quiere decir precisamente eso). Una parte importante de la formación marcial de los samurai durante siglos incluía cosas tan aparentemente poco relacionadas con la guerra como eran la poesía o la ceremonia del té (inicialmente era exclusiva de la casta samurai)

Al final, son la misma cosa, solo que el yoga se creó sin esa variante marcial. Los métodos y formas no son tan diferentes. El objetivo final no es tan diferente