Si utilizase Debian, nada más instalarlo tendría que editar su sources.list para añadir los repositorios contrib y non-free y después añadir la arquitectura de 32 bits para poder usar todos los programas disponibles (por ejemplo steam), además de tener que estar actualizando por terminal sin saber exactamente lo que estaría ejecutando, posiblemente sin hacer autoclean o clean de vez en cuando para limpiar el sistema de paquetes desfasados ni purgar los paquetes que quedasen huerfanos después de eliminar los que los tuviesen como dependencias. Además para buscar paquetes y filtrarlos tendría que recurrir a apt-cache -search algo | grep loquesea, y para instalar paquetes ajenos a la distro a un dpkg -i a pelo o a gdebi que no está instalado por defecto (si mal no recuerdo). En *Ubuntu de todo eso se encargaba el centro de software y ahora el gestor de software de GNOME. Aunque también podría utilizar aptitude o synaptic...
Viendo la elección que hizo de su sistema operativo mejor que se olvide de momento de todo eso y que recurra a un sistema operativo que va a hacer todo eso por él.
durante algún tiempo fue mi distribución principal en un portátil hp hasta que por cambio de disco a SSD decidí probar otra distribución , al principio como comentas es un poco Cristo por el tema de meter los repositorios manualmente pero para mi fue uno de los sistemas mas estables, incluso ahora sigo usando la variante sin entorno gráfico para trastear montando servers.
entiendo que esto para un usuario que empieza en el mundo Linux resulta complejo (a mi me sucedió lo mismo), otra distribución que recomendaría es Linux mint que es muy intuitiva y potente.
aclaró que actualmente estoy probando ubuntu 16.04 y salvo algún fallo no va nada mal
Enviado desde mi LG-D855 mediante Tapatalk