Todos sabemos que W8 está hecho para tablets, pantallas tátiles y demás,
más bien por las nuevas tecnologías.
Que pueda gustar o no, es cuestión de ir probando.
Para los que tenemos ordenadores de mesa y portátiles corrientitos, pues como que no,
pero bueno, como dice el refrán: Para gustos los colores.
Nadie está obligado a instalarlo si no le gusta.