Spirits of Spring es un nuevo videojuego para dispositivos móviles que toca una temática no demasiado habitual en el mundo del entretenimiento electrónico: el problema del bullying o acoso escolar. Para hacerlo pone al jugador en la piel de un nativo norteamericano, quien para devolver la vida a su tierra debe enfrentarse a unos violentos cuervos que están acabando con la primavera y haciéndole la vida imposible a él y a sus amigos animales.
Chiwatin, el joven protagonista de este videojuego, no es un superhéroe capaz de saltar más alto, disparar más lejos o correr más rápido que nadie; según el director creativo de este título, el catalán Ruben Farrus, "el típico atleta de élite que suele protagonizar muchos videojuegos no es un reflejo de lo que somos en realidad". Al contrario, el personaje que controla el jugador en Spirits of Spring es torpe e inseguro, pero no por ello se rinde a la hora de afrontar sus dificultades. "El poder de los videojuegos es la interactividad", explica su creador en declaraciones a La Vanguardia, "por eso decidimos que el juego no estuviera protagonizado por un atleta perfecto, sino por una persona normal que ha de salir adelante con esa inseguridad".
Farrus no se esconde al admitir que él mismo sufrió bullying de pequeño y, como él, también otros de sus compañeros en el estudio canadiense Minority Media. "Cuando empecé a pensar en abordar esta temática me di cuenta de que todo el mundo tiene una historia a compartir al respecto", recuerda. Es a partir de esta premisa de la que nace un videojuego que pretende transmitir al jugador "la sensación de ser la víctima del acoso, pero también lo que siente el agresor". En este sentido, sus creadores han intentado demostrar que cuando se trata de un tema tan serio como el bullying "no todo es blanco y negro, sino que hay grises, y que en este problema cada uno puede tener un rol diferente, o incluso diferentes roles dependiendo de cada situación".
A pesar de tratar un problema tan duro como el del acoso que sufren los más jóvenes, el juego se desarrolla sobre el colorista telón de fondo del folclore de las tribus cree de Norteamérica y cuenta con una historia de cuento apta para jugadores de cualquier edad. "Para hablar de temas tan difíciles a veces has de buscar una metáfora que sea agradable y ayude a la gente a entrar", apunta Farrus. Al mismo tiempo, este diseñador de juegos originario de Balaguer tiene muy claro como "a veces se confunde la idea de producto adulto con la de un producto que ha de ser oscuro y sucio al mismo tiempo, cuando no tiene que ser necesariamente así".
Como demuestra su anterior trabajo, Papo & Yo, el equipo de Minority Media, liderado por el diseñador colombiano Vander Caballero, ya tiene experiencia a la hora de abordar temáticas comprometidas, como es el caso de este juego que trataba sobre las aventuras de evasión de un niño con un padre alcohólico. Para Farrus, los videojuegos todavía tienen mucho camino que recorrer cuando se trata de hablar "de lo que es ser humano y de los problemas del día a día". Y es que a pesar de ser una de las mayores industrias de entretenimiento, "el videojuego todavía no es relevante a nivel cultural, a pesar de que tiene potencial para ser una forma de arte revolucionara".
Aunque de momento solo está disponible en la App Store para iPhone y iPad (al precio de 1,79 euros en el momento de escribir este artículo) sus creadores también contemplan la posibilidad de que Spirits of Spring acabe apareciendo para dispositivos Android y PC en un futuro.
http://www.youtube.com/watch?v=bouVO7hS8fM&feature=player_embedded
http://www.lavanguardia.com/tecnologia/videojuegos/videojuegos-mobile/20141022/54417386988/videojuego-bullying-spirits-of-spring.html