Una parte fundamental dentro de la cultura capitalista es el espíritu competitivo, el afán de derrotar a los adversarios en el libre mercado. Sin embargo, no todo vale, como aprendió Nikolas Galiatsatos, el propietario de una pizzería en Pennsylvania, que ha sido arrestado por intentar infestar de ratones otros restaurantes de la zona que le hacían la competencia.
Según las autoridades policiales de Upper Darby, un suburbio cerca de Philadelphia, Galiatsatos rellenó un saco con ratones y lo depositó en el lavabo de una pizzería cercana, después de haber movido uno de los paneles que formaba el techo. Por lo que parece, el propio Galiatsatos, de 47 años, tenía su propio establecimiento, Nina's Bella Pizzeria, infestado de ratones.
De acuerdo con la versión publicada en la prensa local, el pasado lunes, Galiatsatos entró en el establecimiento Verona Pizza de Darby y pidió utilizar el baño. Al salir, y antes de marchar, pidió una bolsa de patatas fritas.
El propietario, que desconocía que aquel usuario poseía una pizzería en la zona, consideró que su actitud era extraña, y se dirigió al baño. Allí vio que el misterioso usuario había dejado huellas en la tapa del váter, y se dio cuenta de que había manipulado los paneles del techo. Tras auparse en el váter, descubrió que el hombre había dejado una bolsa.
Creyendo que probablemente contendría droga, entregó la bolsa inmediatamente a dos policías que, casualmente, estaban comiendo en el local. Sin embargo, todos quedaron atónitos al abrir la bolsa, y encontrar que había tres ratones vivos.
Los agentes siguieron al sospechoso y descubrieron que dejó otra bolsa en un cubo de basuras frente a la otra pizzería del barrio, la Uncle Nick's Pizza. Dentro de la bolsa, había cinco ratones vivos, y uno muerto. Entonces, procedieron a su detención, y procesamiento.
Michael Chitwood, superintendente del departamento de Policía de Upper Darby resaltó lo inaudito del caso en declaraciones a la prensa: "Nunca habíamos visto algo así, que los ratones se utilizaran como instrumento para un crimen...Esto es terrorismo alimentario a través de los ratones". Según informó la Policía, Galiatsatos había comprado los ratones en una tienda de animales.
En el interrogatorio, Galiatsatos justificó su actitud diciendo que creía que eran sus adversarios quienes primero habían infestado su pizzería de ratones. El caso ya ha sido bautizado como "La Gran Guerra de las Pizzerías"
FUENTE :http://www.elmundo.es/america/2011/03/01/estados_unidos/1299001618.html?a=b968341a20d9c93ea255386b719f7c0e&t=1299013746&numero=