The Wireless Registry ha lanzado el primer registro global del mundo para poner nombres inalámbricos a los aparatos conectados a Internet.
Del mismo modo que Verisign regitraba los dominios originales de páginas web, The Wireless Registry pretende repetir el negocio con el Internet de las cosas. The Wireless Registry es una empresa privada, fundada por los norteamericanos Patrick Parodi y Stillman Bradish a principios de año pero que ahora abre el servicio de registro de aparatos conectados. El registro no es gratuito (con la excepción del primer año). Ponerle nombre a la tostadora de casa cuesta 4,99 dólares por año, y así con cada aparato con conexión a Internet.
"Cualquier objeto que utilice tecnología inalámbrica Wi-Fi o Bluetooth, como su smartphone, router en casa o incluso su coche, tiene una firma inalámbrica única e identidad próxima. Registrar su nombre inalámbrico o SSID le permite poseer su identidad próxima dentro de The Wireless Registry y crear una burbuja virtual que puede estar en un sitio o ir donde vaya usted", explica Patrick Parodi. "Hemos creado un sistema, el DNS of Things, que permite a las personas y empresas tomar el control y añadir significado a sus señales inalámbricas". Del Sistema de nombres de direcciones (el llamado en inglés DNS) al sistema de nombres de las cosas, el que sería TNS.
El nombre que se le dé a un objeto no deberá estar registrado por una marca y, ante los miles de millones de aparatos que pueda haber, incluso ante los varios aparatos que registre una persona, se recomienda que el nombre tenga una raíz común para los mismos objetos de la casa o personas.
The Wireless Registry ha creado una infraestructura y una API gratuita y abierta capaz de asociar enlaces y significados a nombres inalámbricos detectables. A partir de ahí sería más fácil comunicarse con las cosas, no solo su propietario, sino posibles servicios o persona relacionadas con ese aparato, desde el reparador del frigorífico estropeado al supermeracdo que lo llena.
Por supuesto, a la vez se abre el debate de la privacidad, no ya de las personas, sino de los objetos relacionadas con ellas. "El Wireless Registry es un buen ejemplo de una nueva forma para que las personas tengan el control de su identidad próxima, la nueva frontera de la privacidad", dijo Jules Polonetsky, director ejecutivo y copresidente del Future of Privacy Forum. "El FPF espera trabajar con The Wireless Registry para ayudar a suministrar su Smart Store Privacy Code of Conduct".
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