Saben cuántos móviles usados se venden al año en España? No, no hace falta que busque la cifra; era una pregunta retórica. Son 200.000. La cifra me llegó del sitio Locompramos.es, compañía dedicada a la compraventa de electrónica de consumo. De entrada, puede parecer una cantidad alta, pero si la ponemos en contexto no lo es. Tan sólo uno de cada diez móviles pasa al mercado de segunda mano. Dicho de otra forma, únicamente el 5% opta por comprar un teléfono usado. Y eso que son equipos en buenas condiciones. El 75% de los que revenden su terminal lo hace porque quiere comprarse un modelo más reciente.

Entre los datos curiosos que maneja esta compañía de reventa, me ha llamado la atención que los hombres sean más cuidadosos que las mujeres excepto en la franja de edad entre los 35 y los 45 años. Es decir, me llama la atención tanto que seamos más cuidadosos en general como que en una banda de diez años ellas traten mejor a sus móviles. Vamos, mera curiosidad. Al margen de las anécdotas, me parece más interesante que los modelos que más vendemos en el mercado de segunda mano sean el iPhone 4, el 4S, el Samsung Galaxy S3, el Nokia 5800 y el BlackBerry Curve 8520 y, aún más que los móviles de Apple sean los que menos se deprecien. Apenas pierden el 25% de su valor en un año. En el otro extremo, los que más bajan de precio son los Galaxy de Samsung seguidos por los Xperia de Sony.

Pero, ¿adónde van los demás teléfonos? Muchos van a familiares y amigos, pero hay una enorme cantidad que se tira. Según Recyclia, en España ya estamos en un plazo de reposición de 18 meses y cada año se desechan 20 millones de móviles. No todos, probablemente ni la mayoría, terminarán en los contenedores apropiados. Una auténtica lástima, ya que el 90% de los materiales con los que se fabrica un terminal móvil son reutilizables, siempre según la misma fuente.

Pongamos un cubo de una tonelada de móviles (pesan de media 100 gramos, así que serían unos 10.000). De esa tonelada se obtendrían 620 kilogramos de plásticos;25o kilos de metales -fundamentalmente, aluminio y cobre- y ocho gramos de metales preciosos -plata, oro y paladio-. Así que la próxima vez, piénselo. Si no tiene quién se lo compre o a quién dárselo, no lo tire a la basura, busque un tragamóvil. El planeta se lo agradece.

http://www.elmundo.es/tecnologia/2014/06/26/53ac152f268e3e35698b458d.html