Este martes el Consejo de Ministros ha aprobado el real decreto que regulará la actividad de los 'influencers' y en el cual se establecen una serie de requisitos para que una persona se pueda considerar como tal, entre los que figura la necesidad de facturar, como mínimo, 300.000 euros anuales con su actividad audiovisual.
En concreto, el real decreto define a los "usuarios de especial relevancia" ('influencers') en función de tres criterios y, más allá del de carácter económico, el segundo hace referencia a su audiencia y estipula que tienen que superar el millón de seguidores en una única plataforma de intercambio de vídeos o dos millones en el global de su actividad.
Registro Estatal de Prestadores AudiovisualesDe este modo, todos los 'influencers' que cumplan estos criterios deberán inscribirse, en el plazo de dos meses, en el Registro Estatal de Prestadores Audiovisuales como usuarios de especial relevancia.
A partir del momento de su inscripción estarán obligados a cumplir con la normativa en materia de protección de menores y de publicidad en el ámbito audiovisual, como identificar los espacios publicitarios o no hacer publicidad de tabaco, medicamentos o alcohol, es decir, sus obligaciones se homologarán con la de otros agentes audiovisuales.