El coronavirus y el estado de alarma permiten al gobierno tomar medidas extraordinarias, como es el hecho de limitar la libertad de movimiento. El gobierno también ha solicitado a los operadores el acceso a los datos de ubicación anonimizados para ver cómo se va moviendo la población y ver dónde podría ser necesario imponer medidas más estrictas. Ahora, Renfe también pedirá siempre información de los viajeros en cualquier billete que compres.