Todos nos acostumbramos hace ya muchos años a proteger nuestro ordenador. Era la puerta de entrada a Internet y también la puerta por la que se colaban los virus en nuestros equipos. Entendimos que había que proteger el PC con antivirus para evitar que nos atacasen, espiasen o robasen datos y se convirtió en algo natural. Por eso, con el paso de los años y el avance de la tecnología, esa protección se ha debido extender a otros dispositivos habituales de nuestro día a día que no creímos que llegasen a necesitar un antivirus como un ordenador pero que también lo requieren y son habituales los antivirus para Smart TV.