El Servicio Federal de Inteligencia alemán (BND) quiere saber en tiempo real lo que se tuitea y lo que se cuelga en Facebook. Y para ello ha destinado una partida de 300 millones de euros que serán invertidos en el proyecto de nombre interminable "Echtzeitanalyse von Streaming-Daten Strategischen Initiative Technik" (SIT).
El objetivo es actualizar su tecnología digital para desarrollar la capacidad de evaluar weblogs, foros y la comunicación a través de portales como Facebook y Twitter, según desvela hoy el diario alemán 'Süddeutsche Zeitung', y para ello ha encargado un estudio a la Universidad de Múnich.
Esta actividad de espionaje digital tiene como objetivo traspasar las fronteras alemanas. "Mediante la supervisión digital se podría obtener una visión más precisa de la situación en el extranjero", ha comentado un funcionario de inteligencia al periódico alemán, confirmando que Alemania quiere equiparar su actividad en la red a la de agencias de potencias amigas como la NSA estadounidense. El Parlamento alemán se pronunciará al respecto en las próximas semanas y la fecha señalada como final del proyecto de actualización es 2020.
Apenas ha visto la luz este proyecto de actualización, la sociedad civil alemana comienza a reaccionar. El abogado de Berlín Niko Härting presentó el miércoles una denuncia ante el Tribunal Constitucional alemán, pero anteriormente ya ha cosechado varios fracasos en sus intentos por poner freno judicial al registro de correos electrónicos.
Esta práctica de espionaje es habitual por parte de otros servicios de inteligencia. De hecho, durante las protestas en Egipto en 2011, impulsadas principalmente a través de las redes sociales, cientos de activistas fueron detenidos por sorpresa y encarcelados, algunos incluso asesinados, gracias a un monitoreo de su comunicación digital que permitió identificarlos y localizarlos.
Wikileaks filtró documentos encontrados en la oficina de Mubarak que sugerían que había contratado un sofisticado sistema de espionaje de redes sociales que accedía a los cámaras y micrófonos de computadoras y teléfonos móviles siendo capaz de grabar conversaciones por Skype y tomar videos y fotos de quienes eran elegidos como blancos.
Gamma, una empresa de software británica distribuye este sistema de espionaje que monitorea internet y las redes sociales pudiendo también hacer un seguimiento de personas a través de sus equipos. Gamma solo realiza ventas a Gobiernos y Agencias de Inteligencia.
http://www.elmundo.es/tecnologia/2014/05/31/5389856822601dcb668b456b.html?a=5bf408990858c7d0dbe9112ba5bb9e03&t=1401526690