
La investigación está dirigida por el fiscal de Rhode Island y la agencia de Drogas y Alimentos y se centra en si Google ignoró voluntariamente que su servicio publicitario ha admitido anuncios de drogas o medicamentos que han expirado, falsificados o cuya venta en EE UU exige receta médica. El conflicto no se centraría en los resultados gratuitos que ofrece el buscador si no en la inclusión de publicidad relacionada con las búsquedas.
En 2003, Google aseguró que introduciría una política de filtrado en su publicidad que no admitiría anuncios de farmacias sin licencia en EE UU, como ya habían hecho Microsoft y Yahoo!. Sin embargo, en 2004, precisó que esta política no afectaría a las farmacias canadienses.
Fuente: http://www.siliconnews.es/2011/05/13/google-cerca-de-un-acuerdo-que-le-costara-500-millones-de-dolares/