El valor comercial del software sin licencia instalado en los ordenadores de España alcanzó un récord máximo de 874 millones de euros en 2011, consecuencia de un índice de piratería de software del 44 por ciento. Esto representa una nueva subida de un punto respecto al 43 por ciento de 2010 y supone volver a los niveles de 2003.
La Business Software Alliance ha hecho públicos los datos de su Estudio Global de Piratenía, en el que evalúa el estado de la piratería de software en todo el mundo. En el caso de España, la tasa de software ilegal sigue aumentando, superando los niveles registrados en 2010. El presidente del Comité Español de BSA, Teo Alcorta, ha hecho una valoración sobre los resultados, que apuntan a un nuevo aumento del uso de software sin licencia.
"Por segundo año consecutivo, los niveles de piratería en nuestro país han vuelto a crecer, rompiendo la línea de mejoría que habíamos experimentado entre 2007 y 2009. España tiene el dudoso privilegio de ser, junto con Grecia, el único país europeo en el que se ha visto un aumento del nivel de software sin licencia en 2011, lo que supone un verdadero retroceso para nuestro país y nuestra economía", ha comentado Teo Alcorta.
Además, Alcorta ha asegurado que estos datos hacen que España pierda oportunidades reales para mejorar su productividad, competitividad y capacidad para superar la crisis con rapidez. "Ningún país puede espera mejorar su competitividad con esta cantidad de software ilegal utilizada por sus empresas ", ha añadido.
España sigue alejándose de los niveles de software ilegal que deben ser su referencia. En 2011, la tasa media de la UE se redujo dos puntos hasta el 33 por ciento, por lo que ahora España está 11 puntos por encima, una distancia que se considera demasiado grande.
"La piratería de software continúa siendo una carga para la economía global, la innovación y la creación de empleo. Los gobiernos deben tomar medidas para modernizar sus leyes de propiedad intelectual y ampliar los esfuerzos para la aplicación de las mismas, asegurando que los que los piratas se enfrenten a las reales consecuencias que conlleva el uso de software ilegal", ha comentado el presidente y CEO de BSA, Robert Holleyman.
A nivel mundial, el estudio refleja que las tasas de piratería de los mercados emergentes se alejan de los mercados maduros - 68 por ciento frente a 24 por ciento de promedio - y los mercados emergentes representan una abrumadora mayoría del incremento global del valor comercial del software robado.
Esto ayuda a explicar la dinámica del mercado detrás de la tasa de piratería de software mundial, que rondaba el 42 por ciento en 2011, mientras que un mercado en constante expansión en el mundo en desarrollo impulsó el valor comercial del software ilegal hasta los 45.600 millones de euros.
El estudio también incluye otros resultados, así como un perfil del usuario que utiliza el software sin licencia. A nivel mundial, los piratas de software más frecuentes son mayoritariamente hombres jóvenes y tienen más del doble de probabilidades de vivir en una economía emergente que vivir en un mercado maduro (38 frente 15 por ciento).
Además, destaca que los responsables de tomar decisiones en las empresas admiten que piratean software con más frecuencia que otros usuarios - y son dos veces más propensos que otros a manifestar que compran software para un ordenador y luego lo instalan en equipos adicionales en sus oficinas.
Por último, también a nivel mundial, existe un fuerte apoyo a los derechos y protecciones de la propiedad intelectual, pero también una "preocupante" falta de incentivo para que los piratas cambien su comportamiento en la práctica, según BSA. Sólo un 20 por ciento de los piratas frecuentes en los mercados maduros - y un 15 por ciento en los mercados emergentes - indican que el riesgo de ser detenido es una razón para no usar software ilegal.
FUENTE :http://www.iblnews.com/story/69422