"Perdona, ¿me haces una foto con éste para colgarla en Facebook?", preguntaba anoche Andreas Baum, que a sus 33 años ha conseguido cerca de un 9% de los votos en las elecciones de Berlín y ha abierto la puerta del Parlamento regional al Partido Pirata.
La escena tenía lugar en un local cutre del barrio de Kreuzberg en el que los Piratas habían improvisado una fiesta para celebrar los 15 escaños y en el que se agolpaba, además de una muchachada adicta al móvil, un nutrido grupo de cuarentones de muy diferentes experiencias y extracto social. Había informáticos, profesores, empleados de empresas químicas y muchos muchos estudiantes.
Tal y como le han reprochado sus contrincantes electorales, entre los Piratas hay muy pocas chicas. "Sí, bueno, ése no es un problema sólo del partido, sino de mi vida en general. Hago todo lo posible por solucionarlo", bromeaba Baum, para explicar a renglón seguido que están en contra de cualquier tipo de cuota.
Este joven y heterodoxo líder político trabaja como asesor al cliente en una pequeña empresa de internet y, con aire despistado, reconoce la carencia de programa electoral de su partido más allá de pedir restricciones cero en la Red, al tiempo que expone una visión del mundo no muy ajustada a las reglas del juego de la política convencional y muy preocupado por la transparencia y por la participación ciudadana.
Guiño a los Indignados
Baum añade que el movimiento Pirata se inspira más en las formaciones hermanas que han ido surgiendo en los países nórdicos que en la indignación mediterránea, pero no le hace ascos a nada y establece posibles relaciones al instante. "Sí, conozco el Movimiento de los Indignados de Madrid. Ya sé que no tienen afiliación política, pero esa gente podría votarnos porque compartimos la idea de que hay que darle la vuelta a la política, como a un calcetín".
El recuento final indica que el Partido Pirata ha obtenido 120.000 votos en la capital alemana. La formación política fundada en 2006 y que en 2009 obtuvo un marginal 4% en las regionales de Berlín, ha cuajado como fuerza política mucho más deprisa de lo que sus propios candidatos podían imaginar.
"No sabemos todavía qué vamos a hacer en esta legislatura, tendremos que pensarlo. No podíamos ni soñar con un resultado tan espectacular y por eso no hemos planeado nada todavía", reconoce llanamente Baum, que mantiene conversaciones simultáneas en el mundo real, con los presentes, y en el mundo virtual, a través de Twitter.
'¡Al 'abordaje'!
Los analistas consideran que se han hecho con el 15% del primer voto y que en la siguiente franja de edad, entre los 35 y los 44 años, se han llevado un 9% de las papeletas. Si a eso le sumamos un 3% en el siguiente grupo, hasta la frontera de los 60 años, nos encontramos con la ecuación que ha permitido su 'abordaje' del Parlamento regional.
"No tenemos experiencia política, pero aprendemos rápido y, en muchos sentidos vamos por delante. Acabamos de demostrar cómo se puede obtener un sorprendente resultado electoral sin haber hecho campaña en la televisión, por ejemplo, prescindiendo completamente de ese medio y volcándonos allí donde nos movemos como peces en el agua", se pavonea el nuevo diputado regional de Berlín, que reconoce su admiración por el candidato ganador y presidente-alcalde por tercera legislación consecutiva de Berlín, Klaus Wowereit, con quien no le importaría en absoluto trabajar conjuntamente.
"Los votantes esperan que con nosotros llegue aire fresco a la política, en eso vamos a centrarnos. Y a 'Wowi', igual que al resto, le vendría bien un poco de aire fresco", culmina.
FUENTE :http://www.elmundo.es/elmundo/2011/09/19/internacional/1316424795.html?a=ad97de6bc671bf28cd2bda5917b83dd7&t=1316436518&numero=