Google Chrome es la puerta de entrada a Internet usada por 7 de cada 10 usuarios. Millones de usuarios confían en este navegador para leer su correo, leer las noticias, y buscar cualquier tipo de contenido en la red. Google suele trabajar constantemente para garantizar que todos los usuarios puedan conectarse de forma segura y sin riesgo de que los piratas informáticos pongan en peligro su seguridad. Sin embargo, no siempre es posible, y en ocasiones podemos encontrarnos con graves problemas como el que nos afecta hoy.
La firma de seguridad Avast ha detectado recientemente una nueva serie de ataques informáticos que se aprovechan de un reciente fallo de seguridad en el navegador: CVE-2022-2294. Este fallo de seguridad, a grandes rasgos, se encuentra dentro de la función WebRTC de Chrome, y permite saturar el búfer del proceso para conseguir ejecutar código remoto en la máquina.