Yota, el móvil de las dos caras (dos pantallas), comenzará a venderse fuera de sus fronteras, Rusia, en el próximo año, según han anunciado sus promotores.
Al igual que sucede en China, Rusia es un mercado diferente en tecnología, donde no imperan el buscador Google ni centros comerciales como Amazon. También en móviles tienen sus propias marcas y una de ellas es Yota, que ha diseñado uno de los smartphones más originales y que resuelve uno de sus problemas: una pantalla pensada más para ver vídeos o para fotos que para leer largos textos y que consume demasiada energía. YotaPhone tiene las dos pantallas.
Mostrado en la pasada edición de la Mobile World Congress (MWC) de Barcelona, la empresa ha anunciado que el próximo año su YotaPhone se pondrá a la venta en veinte países de Europa y Oriente Medio, después de que se lanzara tímidamente en Austria, Francia, Alemania y España, además de en Rusia. Ahora la producción ya es en masa, pues las reservas en Rusia han superado las 10.000 peticiones.
"Si realmente la marca tienen éxito, en dos o tres años todo el mundo nos estará copiando", declaró a Reuters el presidente ejecutivo de Yota Devices, Vlad Martínov, que descartó vender el móvil en Estados Unidos.
El YotaPhone, ensamblado en China con componentes fabricados en Japón y Taiwán, cuenta con una pantalla retroiluminada de cristal líquido (LCD ) y una pantalla de tecnología e-ink, que es la habitual en los lectores electrónicos. Sus pantallas, una delante y otra detrás del aparato, son de 4,3 pulgadas, algo mayor que un iPhone y su peso de 146 gramos (112 el iPhone). Cuenta con dos cámaras una de 13 megas y otra de uno, y una batería de 1.800 MHz.
"Es un nuevo tipo de gadget. El problema de los smartphones es que su pantalla está siempre en negro, dormida, y nos parece un error fundamental", señala Martinov. En el caso de la pantalla e-ink permanecería siempre encendida, dispuesta para la lectura, pero también para la recepción y el envío de mensaje de las redes sociales.
El teléfono, basado en el sistema operativo Android, cuesta en Rusia 19.990 rublos (442 euros) frente a los 29.000 rublos del iPhone 5C de Apple. En Europa y en los Emiratos Árabes Unidos el YotaPhone se venderá por 499 euros.
En noviembre, por primera vez las ventas de teléfonos inteligentes superaron en Rusia a la de los móviles básicos, aunque por el valor de las ventas el smartphone supone el 85% del total.
Este teléfono llamó la atención del cofundador de Apple, Steve Wozniak, que en una reciente entrevista delaraba que el YotaPhone, del que no recordaba ni su nombre, era lo más rompedor que había visto en los últimos tiempos.
http://tecnologia.elpais.com/tecnologia/2013/12/04/actualidad/1386145666_475737.html