Ahora se autoconectará a internet, hasta las monedas y billetes que tengamos, cada libro, revista o bolígrafo vendido... incluso los botones de la camisa (por si acaso se te rompe, uno puede automáticamente buscarte un/a costurero/a, una tienda donde comprar otro botón igual o el precio de los mismos.
...y mientras las empresas intentanto sembrar en los gobienros la tenebrosa necesidad de las distintas velocidades en internet, para que los más ricos paguen más por lo mismo y los más pobres no puedad hacer nada, que les resulte más costoso que el tráfico generado por una máquina exprendedora de tabaco...
Que previsión más pésima sobre la humanidad. Es verdad que la sociedad, el conocimiento y los valores van decandencia, pero jamás me atrevería a decir que conectaremos en un futuro todo a internet, incluso nuestro propio cuerpo. Todavía han de existir debates entre expertos cómo lo son: científicos, médicos y gobiernos. Que la proposición y desarrollo de tecnologías vaya a una velocidad vertiginosa no significa que las apliquemos en nuestro día a día.
Y si pasara lo que tú dices, me divertiría mucho hackeando los botones de las camisas, entre otras cosas