Flash Player sigue siendo un grave problema para la ciberseguridad mundial. Sus múltiples vulnerabilidades lo han convertido en un gran receptor de malware. Los fallos críticos se registran consecutivamente y permiten la creación de exploits que son ampliamente aprovechados por los ciberdelincuentes.
El problema es que la extensión del reproductor multimedia y plug-in de Adobe que permite agregar contenido en la Web ha sido tan masiva que no podía eliminarse de un plumazo y millones de sitios web usaban esta tecnología que permite llevar multimedia a la web y servir publicidad, en muchos casos imprescindible para el mantenimiento de los sitios.
Todas las grandes tecnológicas han puesto en marcha programas de migración hacia otros formatos más seguros, modernos y abiertos como HTML5 y la misma Adobe anunció la finalización del soporte para el plug-in de Adobe Flash en 2020.