Desde Panda Security advierten sobre la peligrosidad de ciertos trabajadores, que podrían actuar por despecho o estar pagados por terceros para robar información.

Los ciberdelincuentes, esos maleantes externos con las suficientes competencias y sobradas intenciones de robar datos confidenciales que no les pertenecen, no son los únicos que pueden hacer pasar a las empresas un mal trago.

Los propios empleados también se pueden convertir en un verdadero quebradero de cabeza. De hecho, desde Panda Security aseguran que, “este Halloween, la peor pesadilla de las organizaciones está en sus entrañas”. Esto es, en “las personas que la forman”. Y es que, “desde un espía infiltrado por un Estado, a un empleado captado por bandas de terrorismo o simplemente empleados descontentos que sustraen información por despecho” pueden jugar una mala pasada a quienes los han contratado.

Por eso se recomienda optar por soluciones de protección avanzada, detección de amenazas y control de procesos activos en la red, así como actualizar siempre los sistemas y darle una vuelta a las políticas instauradas sobre empleados.

Según datos de IBM de los que se hace eco la firma de seguridad española, 6 de cada 10 ataques contra empresas acaecidos este año venían de dentro. Mientras, el Ponemon Institute apunta directamente a los “criminal insiders” como los grandes causantes de las filtraciones de información, junto a los hackers.

De los ataques que tienen como protagonistas a empleados, casi todos serían intencionados y salen más caros que un problema del sistema o fallos involuntarios. Solamente la cuarta parte de sus ataques se produciría sin querer.

http://www.silicon.es/empleados-pesadilla-empresas-seguridad-2321922