Acaba de saltar la noticia, y es que AMD va a hacer lo nunca visto en la industria del PC. Efectivamente y al parecer por lo filtrado, los de Lisa Su volverán a activar la retro compatibilidad de sus nuevos procesadores Ryzen 4000 bajo Zen 3 con algunas placas base actuales. La medida, no confirmada evidentemente por la empresa, supone que sus usuarios podrían optar por comprar una nueva CPU más potente sin tener que cambiar su placa base. ¿Qué chipsets darán soporte?