Después de ganarnos con sus planes gratuitos y casi ilimitados, Google quiere recoger los frutos de esta estrategia estrechando los espacios y obligando a sus usuarios a pagar

Hace tiempo que nadie puede toser a la nube de Google y sus servicios de almacenamiento. Sus planes gratuitos que ofrecían un espacio casi ilimitado para archivos, fotografías, documentos y un largo etcétera hicieron que los de Mountain View también controlasen este mercado con su todopoderoso Drive. Pero en los últimos meses Alphabet ha empezado a cambiar su estrategia y es que nada es gratis para siempre. Con la excusa del aumento de datos almacenados en la nube, Google está estrechando sus ofertas obligando a sus usuarios a pasarse a los planes de pago si quieren mantener su estado actual.

Según analizan en el medio estadounidense Bloomberg, Google está comenzando a empujar como nunca antes a sus usuarios para que se apunten a Google One, su servicio de almacenamiento que permite tener más espacio y más opciones. Por el precio de 2 euros al mes te ofrece una mayor capacidad de almacenamiento, acceso a asesores de la compañía, seguridad y bonificaciones o precios especiales en determinadas compras.

Entre las bonificaciones que incluye la suscripción están la posibilidad de obtener hasta un 10% en crédito de Google Store para usar cuando se compren dispositivos y accesorios en esta tienda, así como descubrir descuentos exclusivos en hoteles que se reserven a través de Google. Por ello, en este caso, es necesario fijarse en los precios para miembros de Google One cuando se estén localizando hoteles en el buscador.

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Esperemos que sea así durante mucho tiempo.