No es la primera vez, pero ha vuelto a suceder. Dos empleados del departamento de Relaciones Públicas de Huawei felicitaron el año nuevo desde un terminal de Apple y han sido sancionados.
Uno de los empleados será degradado y se le recortará el salario, mientras que el otro no podrá optar a un ascenso previsto durante un año. Estas imágenes “han afectado negativamente a la reputación de marca de los teléfonos inteligentes de Huawei”, lamentó la compañía en una circular interna a la que ha tenido acceso el sitio web de noticias económicas, Caixin, citado por la agencia EFE.
El caso se produjo en la subsidiaria de mercadotecnia Sapient, cuyo equipo no pudo conectarse a la red privada virtual utilizada para saltarse la censura del “Gran Cortafuegos chino”, que bloquea los servicios de Twitter, Facebook o Google.
Por ello, felicitaron el año nuevo con un tuit utilizando una tarjeta SIM de Hong Kong y un terminal de Apple. Aunque el mensaje fue borrado al poco tiempo, miles de usuarios compartieron la captura de pantalla con la inscripción fatídica para los empleados: “vía Twitter para iPhone“.
El uso de múltiples dispositivos de diferentes marcas es algo habitual en el mundo de hoy, sea en el hogar o en la empresa bajo el fenómeno BYOD y no es inhabitual emplear un iPhone con un portátil Windows o un terminal Android con un Mac.
Sin embargo, hay que tener extremo cuidado con situaciones como las que nos ocupa y más si eres empleado de relaciones públicas y mandas un mensaje en nombre de una compañía que ha hecho un esfuerzo e inversión enorme en los últimos años (incluido en marketing) para hacerse un hueco en el competidísimo mercado del smartphone. Y con éxito. Huawei es el segundo fabricante mundial tras superar a la mismísima Apple y tiene modelos que no desmerecen en absoluto a los iPhone.
Ya decíamos que no es un caso único. Uno de los más notorios fue el del vicepresidente y responsable de sistemas operativos y el “flequillo más famoso de Microsoft”, Joe Belfiore, cuando de vacaciones en Japón en 2016 fue cazado tuiteando con un iPhone. Belfiore explicó que prueba regularmente productos rivales, no necesariamente porque quiera usarlos sino para comprobar el estado de la competencia, y que también trabajaba con portátiles MacBook y terminales Nexus por el mismo motivo.
No sabemos si fue convincente, pero el caso levantó la esperable polvareda mediática en una época en la que Microsoft estaba peleando por sobrevivir en el segmento del móvil. No fue la primera vez (ni será la última) que vemos estas “pilladas” de ejecutivos o empleados usando productos que no son de “su propia casa” y que suponen una publicidad gratuita para sus rivales.
https://www.muycomputer.com/2019/01/04/huawei-iphone/