El gigante tecnológico Google solicitó este martes permiso al Gobierno de Estados Unidos para publicar un resumen de los datos de los usuarios que fueron solicitados por la Administración Obama por razones de seguridad nacional.
En un comunicado, dirigido al secretario de Justicia, Eric Holder, y al director del FBI, Robert Muller, la compañía reivindica que de publicarse las cifras, quedaría demostrado que los datos a los que ha tenido acceso el Gobierno estadounidense son muy inferiores a lo que se ha asegurado tras las recientes filtraciones.
La compañía de Internet ha estado bajo escrutinio tras las revelaciones del ex técnico de la CIA, Edward Snowden, sobre el control que el Gobierno, a través de un programa de la Agencia de Seguridad Nacional de recopilación de datos.
"Pedimos que ayuden a hacer posible que Google publique en nuestro Informe de Transparencia las cifras totales de solicitudes de seguridad nacional -incluyendo las revelaciones de la (Ley de Vigilancia de Inteligencia Extranjera) FISA en cuanto a la cantidad que recibimos y su alcance", reza la carta, firmada por el jefe de asuntos legales, David Drummond.
Añade que "las afirmaciones en la prensa sobre que nuestro cumplimiento de estas solicitudes da acceso sin restricciones al Gobierno de EEUU a los datos de nuestros usuarios son simplemente falsas".
Insiste en que los datos de Google muestran claramente que su cumplimiento de esas solicitudes "está muy lejos de las afirmaciones que se hacen. Google no tiene nada que ocultar".
Drummond añade que la compañía "siempre ha dejado claro que cumple con los requerimientos legales vigentes. Y la semana pasada, el director de Inteligencia Nacional reconoció que los proveedores de servicios han recibido peticiones de la FISA".
La reacción del gigante tecnológico surge días después de que el joven informático filtrase la existencia de dos programas secretos de recopilación de datos telefónicos y digitales de millones de usuarios por parte del Gobierno de Estados Unidos. El Gobierno se ha amparado en la ley FISA y en la Ley Patriota, que permiten la recopilación de datos personales con propósitos antiterroristas.
En 2011 el presidente Barack Obama promulgó otra extensión de la Ley Patriota, aprobada tras los atentados de 2001, hasta el 1 de junio de 2015 sin modificaciones en la Sección 215, que autoriza la intromisión del Gobierno en los registros que están en manos de terceras partes, como las cuentas bancarias, bibliotecas, agencias de viaje, alquileres de vídeos, teléfonos, datos médicos, de iglesias, sinagogas y mezquitas.
http://www.elmundo.es/america/2013/06/11/estados_unidos/1370976062.html?a=56ad3c56135a449758825ff59949103c&t=1370986005&numero=