En los últimos tiempos hemos visto a muchos estados hacer campañas contra la privacidad y el cifrado, exigiendo el debilitamiento de esto último y/o colocar puertas traseras en el software para poder vigilar mejor y así garantizar la seguridad.
Hemos publicado casos como los de Reino Unido, China y el estado de Nueva York, que han insistido en sus campañas y propuestas contra la privacidad y el cifrado, mientras que otros como Países Bajos han defendido el cifrado como una herramienta de defensa para su ciudadanía, aunque no a cualquier precio.
En las últimas horas hemos sabido que hay voces dentro del Gobierno de Francia que rechazan las puertas traseras en favor de la seguridad. Esto choca con lo conocido hasta ahora y que se hizo público poco después de los últimos atentados terroristas perpetrados en ese país, llegándose a plantear la prohibición de Tor y las Wi-Fi públicas y compartidas.
Las secretaria de estado Axelle Lemaire ha calificado la idea del debilitamiento del cifrado como “vulnerabilidad por diseño”, advirtiendo que esto podría a lo mejor ayudar a las agencias de inteligencia y las fuerzas de la ley, pero también podría dar facilidades a quienes no tienen buenas intenciones. “A juicio del gobierno, no se trata de una buena solución”, concluyó Lemaire.
La guerra contra el cifrado y en favor de los backdoors se ha convertido en una prioridad para muchos gobiernos que quieren garantizar la seguridad. Los gobiernos parece que no tienen muy claro que una brecha de seguridad puede terminar siendo utilizado por cualquiera, dando igual lo mucho que se oculte todo por parte de los servicios de inteligencia.
Fuente | BetaNews
http://www.muycomputer.com/2016/01/19/francia-no-puertas-traseras