¿Qué pasa cuando la tecnología se cruza con los intereses de gobiernos, grupos extremistas, criminales y ciudadanos? ¿cuando la misma herramienta que protege tu anonimato en internet podría ser utilizada por los activistas de Estado Islámico?
Amir Taaki lo sabe. Es uno de los programadores clave detrás de una herramienta que podría esconder la identidad de la gente que hace transacciones económicas por internet utilizando la criptomoneda Bitcoin.
Taaki creó junto a su amigo Cody Wilson, conocido por su impresión en 3D de una pistola, el Dark Wallet, algo así como un monedero clandestino para ser utilizado en la red oscura.
El objetivo de este monedero es hacer que las transacciones en bitcoins sean prácticamente imposibles de rastrear.
Tanto el gobierno de Estados Unidos como las autoridades bancarias europeas están estudiando cómo regular el uso de esta criptomoneda y están particularmente preocupados por la creación de Taaki y Wilson, que podría ser utilizada para el lavado de dinero.
Esos temores se intensificaron recientemente cuando un blog sobre tecnología que apoyaba la misión de Estado Islámico en Siria e Irak publicó y compartió información detallada sobre cómo mantener el anonimato en internet.
El blog ofrecía una guía paso a paso sobre cómo utilizar Tor, uno de los buscadores utilizados para conectarse con la llamada "red oscura", y redes privadas virtuales (VPNs por sus sigles en inglés) para esconder la ubicación e identidad de los ususarios, o sus direcciones de IP.
En el manual de instrucciones sobre cómo mantenerse escondido en la red se presentaba el monedero oscuro como una opción para "enviar instantáneamente millones de dólares en Bitcoins desde Estados Unidos, Reino Unido, Sudáfrica, Ghana, Malasia, Sri Lanka o cualquier otro sitio directamente a los bolsillos de los mujahidin (o milicianos islamistas)".
"Es simple, fácil, y le pedimos a Alá que apremie su desarrollo para usarlo", decía el blog.
El monedero oscuro involucra una tecnología entre pares llamada en inglés "trustless mixing", algo así como una "mezcla sin confianza", donde una transacción se mezcla con otras que se hagan al mismo tiempo.
Escaleras manchadas de rojo
Aunque la revista Forbes lo incluyó en la lista de futuros multimillonarios, Taaki pasa su tiempo viviendo en campamentos de okupas por toda Europa.
Actualmente está viviendo en el centro de Londres en una casa ocupada que fue utilizada como lugar de reuniones para las protestas contra el G8 el año pasado.
Mientras hablamos señala las manchas en las escaleras que dejaron las bombas de pintura que entonces le lanzaron a la policía.
En una sala sin apenas decoración, Taaki se sienta junto a un grupo de amigos: son diseñadores y programadores que quieren sacar adelante el proyecto de la billetera clandestina. También hay un inversor en Bitcoins y un periodista de tecnología.
Y sentado en el suelo sobre unos cojines está Peter Todd, uno de los principales desarrolladores de la idea del Bitcoin.
En una de las paredes de la sala se puede leer una antigua dirección del sitio Silk Road, uno de los pioneros en el comercio clandestino en internet, ya clausurado por el gobierno estadounidense.
Tecnología para todos, incluidos los extremistas
Cuando le preguntamos a Taaki si él se sentía cómodo con la idea de que su proyecto pudiera ser utilizado por los activistas de EI, su respuesta fue clara.
"Sí. De hecho yo cerré mi cuenta de Twitter porque ellos estaban cerrando las cuentas relacionadas con EI".
Y añadió: "No creo que censurar información sea el camino".
"No puedes impedirle a la gente que use la tecnología por tus prejuicios personales. Nosotros defendemos los sistemas libres y abiertos, donde todos pueden participar, sin importar quién seas".
Peter Todd concuerda: "Creo que obviamente los terroristas lo usarán, pero los beneficios ciertamente superan el riesgo".
"Los terroristas usan internet, los terroristas usan la libertad de expresión y hemos asumido que eso es un sacrificio que debemos aceptar".
Raíces anárquicas
No es una opinión que complazca a mucha gente, pero estos fuertes ideales libertarios impulsan el lado político del movimiento Bitcoin.
Por un lado, cada vez hay más presión hacia una regulación por parte de quienes desean que Bitcoin se convierta en un mecanismo de pagos convencional.
Por otro lado están los programadores que están tratando de conservar sus raices anárquicas.
Entre las iniciativas de regulación actuales en Estados Unidos está la introducción en nueva York de la licencia Bit, que te permite hacer negocios utilizando Bitcoins, una facilidad a la que se oponen los programadores de Dark Wallet.
Jamie Bartlett, académico y autor de Dark Net, o la red oscura, pasó tiempo con los creadores de la billetera clandestina en su antiguo centro de operaciones en Calafou, España.
"Los extremos libertarios del movimiento de los Bitcoins son de hecho increiblemente importantes", dijo Bartlett.
"Muchos de esos individuos se han mantenido fieles al espíritu original de Bitcoin, que era un proyecto político para tratar de quitarle poder sobre la moneda y las tasas de interés a los bancos centrales".
Los programadores de Dark Wallet quieren que su tecnología sea utilizada de manera subversiva, aún sabiendo que podría ser más útil que el dinero en metálico en las manos de un grupo como Estado Islámico (EI).
Libres de escrutinio
Si las transacciones de Bitcoin sí acaban en manos de los milicianos de EI, entonces habrá más llamados por parte de los gobiernos para su regularización.
"Si llega a suceder que ISIS usa Bitcoin o el Dark Wallet o cualquier otra tecnología de este tipo, entonces la opinión pública y la preocupación ciudadana sobre estas tecnologías cambiará dramáticamente", asegura Bartlett.
"Los gobiernos empezarán a ejercer regulaciones mucho más duras y la opinión pública también se volverá en contra del programa, así que sus vidas se volverían mucho más difíciles, especialmente porque son tan abiertos que realmente no les importa en absoluto quién usitliza su tecnología", comenta.
"Esto va más allá de Bitcoin. Estos chicos están realmente tratando de cambiar la manera como funciona internet y hay una posibilidad de que lo logren".
Para el equipo de Dark Wallet, el objetivo de ser libres de todo escrutinio está por encima de cualquier otro interés, y eso encaja con lo que ellos ven como un paisaje geopolítico que está cambiando.
"El cambio es algo inevitable. Estamos hablando del levantamiento de movimientos ideológicos", dice Taaki.
"Nos guste o no vamos a tener que lidiar con esta nueva realidad, y vamos a tener que trabajar con la tecnología de esta nueva realidad".
http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2014/09/140921_tecnologia_billetera_clandestina_jgc