Soldados israelíes desplegados en el distrito de Majdal Shams, en los ocupados altos de Golán.
Las fuerzas de guerra del régimen israelí amenazan con intevenir militarmente en el distrito sirio de Druze, en los altos de Golán.
La amenaza se produce después de dos incidentes peligrosos cerca de los altos, uno de los cuales ha terminado con un druso israelí herido.
El primero y más grave ha sido un atentado en la disputada ciudad fronteriza siria de Hadar, donde han muerto al menos nueve personas y han resultado heridas otras 23 por la explosión de un coche bomba detonado presuntamente por el grupo terrorista Frente Al-Nusra (redenominado Frente Fath Al-Sham).
Según un comunicado de este viernes de las fuerzas de guerra israelíes (IDF, por sus siglas en inglés), la intervención se realizaría por un compromiso del régimen con la población drusa del distrito.
“El ejército israelí está preparado y listo para ayudar a los aldeanos y evitar el daño o la ocupación del pueblo”, reza el texto.
Las fuerzas de ocupación israelíes han desplegado de hecho un contingente en uno de los pasos fronterizos como prolegómeno a una posible “operación de protección de los residentes al norte del país”.
Estos enfrentamientos se han extendido, según el diario israelí Yedioth Ahronoth, a la localidad siria ocupada por Israel de Majdal Shams, uno de cuyos residentes ha resultado herido por lo que podría tratase, a la espera de que se confirme, de un atentado o de un tiroteo, según ha hecho saber la portavocía militar israelí.
No está claro cómo el régimen de Tel Aviv tratará de avanzar en territorio sirio ni qué tipo de respuesta darían a esa eventualidad Damasco y sus aliados.
Parece que Israel trata de fingir la hipótesis de que el régimen se opone a los terroristas y trata de luchar contra ellos. El diario estadounidense The Wall Street Journal informó en junio de que Israel ha estado ayudando en secreto a los llamados “rebeldes sirios” ―considerados terroristas por Damasco― instalados en torno a los altos de Golán durante muchos años.
Además de esa asistencia, Israel ataca a menudo las posiciones en torno a la frontera del Ejército sirio, involucrado en la lucha antiterrorista, para bloquear sus avances hacia las zonas ocupadas por los terroristas y “rebeldes” en la zona.
Damasco ha denunciado en reiteradas ocasiones que el régimen israelí y otros países arman a los terroristas que luchan contra el Estado sirio.
“Desde el comienzo de la crisis siria (marzo de 2011) se ha descubierto y confiscado gran cantidad de armas y municiones en diferentes zonas de Siria y hemos encontrado armas estadounidenses e israelíes en posesión de Daesh (acrónimo árabe de EIIL) y otros grupos terroristas”, se lee en un comunicado del Ministerio de Defensa de Siria.