¿Para cuando una compensación de las sociedades de autores a los sufridos usuarios que nos vemos obligados a sufrir a menudo el "arte" de algunos de sus protegidos?

Yo si tengo que escuchar por cualquier motivo "reageton" o cualquiera de esas bazofias, exijo una compensación a esas entidades, ya que sin mi consentimiento explicito esa escoria pútrida suena en lugares sin avisar y agrede a mi sistema nervioso y a mi sentido del buen gusto.

Si quieren que escuche o vea determinadas obras de sus protegidos, que me producen una enorme repugnancia, veo obvio que deben de compensarme económicamente por mis molestias.

O eso, o entierran a los discos, y a los autores en un pozo muy hondo, y ellos mismos pueden ir detrás para hacerles compañía