Por: Javier Valenzuela| 08 de marzo de 2012
¿Puede una campaña lanzada en Internet por ciudadanos de a pie conseguir la detención en lo que queda de 2012 del ugandés Joseph Kony, uno de los autores de crímenes contra la humanidad más ominosos de nuestro tiempo, una especie de Bashar el Asad de la jungla? Es lo que intenta la ONG Invisible Children y, a tenor de la difusión viral –decenas de millones de visitas en apenas unos días - del vídeo que ha realizado para promover esta causa, lo menos que puede decirse es que está consiguiendo hacer famoso internacionalmente a Kony.
Kony lidera desde finales de los años ochenta del pasado siglo el Ejército de Resistencia del Señor (LRA en sus siglas en inglés), una delirante combinación de banda armada y secta fundamentalista que aspira a establecer un gobierno teocrático en Uganda basado en los Diez Mandamientos bíblicos. Su especialidad criminal ha consistido desde entonces en secuestrar niños de ambos sexos para convertirlos en soldados o en eslavas sexuales. Se calcula que más de 40.000 pequeños habrían caído en manos del LRA a lo largo de su historia. Su actuación, ahora más debilitada en Uganda, se extiende asimismo a países limítrofes como la República Democrática del Congo, la República Centroafricana y Sudán del Sur.
Monaguillo católico en su infancia, Kony se proclama “un buen cristiano” que quiere que Uganda sea “una nación cristiana”. Como a tantos otros líderes de sectas, ello no le impiden tener decenas de esposas y ser el primero en abusar sexualmente de las chicas que capturan sus seguidores.
Kony ocupa el primer lugar en la lista de criminales internacionales reclamados por el Tribunal Penal Internacional de La Haya. Sin embargo, Jason Russell, uno de los fundadores de Invisible Children, señala con razón que la inmensa mayoría de la población mundial no tiene la menor idea de su existencia.
Invisible Children lleva más de 9 años trabajando para poner fin a las actividades de Kony y ayudar a sus víctimas. Su intensa acción de base consiguió que, el pasado otoño, Barack Obama decidiera enviar un centenar de soldados norteamericanos a Uganda para ayudar a las fuerzas regulares de ese país a combatir al LRA. Ahora la ONG propone un objetivo global: que Kony sea finalmente detenido este año de 2012. Para ello pide a la opinión publica norteamericana y mundial una movilización intensa para que los políticos se interesen por esta causa.
Por supuesto, el éxito del video ha suscitado una polémica inmediata sobre las motivaciones de Invisible Children. Ahora mismo, yo prefiero ir al fondo del asunto y atenerme al espeluznante testimonio sobre la vida y los milagros de Kony que, en junio de 2007, publicó en EL PAÍS Pere Rusiñol tras viajar al corazón de las tinieblas del Ejército de Resistencia del Señor.
FUENTE :http://blogs.elpais.com/cronica-negra/2012/03/detened-a-kony.html