A los habitantes de Herculano y Pompeya los mataron las nubes piroclasticas, nubes de ceniza que pueden alcanzar mas de 1.000 ºC y mas de 200Km/h.No se quedaron petrificados, dentro de esas figuras de ceniza no hay nada, son moldes, la materia organica se consumio por el calor.
Cualquier dia puede volver a pasar, el Vesubio solo esta dormido, y hoy en dia en su zona de acción viven millones de personas.
la nube piroclastica es esta del video, en esta murieron los Krafft, un matrimonio de vulcanologos muy conocidos, por grabar imagenes impresionantes de volcanes, para autofinanciar sus estudios, el video lo grabaron ellos mismos.
aqui teneis lo que hacian, murieron en 1991, todos estos videos son anteriores.
el kilauea es un volcan en escudo, como dice Orobastu, son lavas muy fuidas y muy calientes, que salen por el crater y crean coladas de lava,por eso no son peligrosos, lo unico que hacen es aumentar el tamaño de la isla, y la gente siempre vivio en estas islas por lo fertiles que son, y todo por ser volcanicas.
«Los moldes de los cuerpos presentan lo que se conoce como cadaveric spasm, una postura adoptada únicamente cuando la muerte es instantánea. Después hemos analizado los restos óseos y, gracias a los análisis de ADN, hemos detectado cambios causados por las elevadas temperaturas –añade el investigador–. En el laboratorio, hemos sometido fragmentos óseos a niveles cada vez más elevados de temperatura y hemos observado las modificaciones que se producían. Estos fragmentos se han comparado posteriormente con los restos de las víctimas de Pompeya, y hemos concluido que en aquella ciudad los cuerpos fueron expuestos a una temperatura cercana a los 300 ºC. En Herculano se alcanzaron los 600 ºC».
«Por otra parte –afirma Mastrolorenzo–, ni siquiera el tiempo de paso de la nube, entre uno y dos minutos, puede asociarse a una muerte por asfixia, que requiere un tiempo más largo. Por tanto, aquellas posturas de los cuerpos de las víctimas que durante muchos años se consideraron la expresión de una larga agonía, son en realidad la prueba de una muerte instantánea: la elevadísima temperatura».
La investigación, titulada «Lethal thermal impact at periphery of pyroclastic surges: evidences at Pompeii», se ha publicado en la revista científica PlosOne. —Stefania Matorelli.