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El diputado Metin Külünk, miembro del gobernante Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP, por sus siglas en turco) del presidente Recep Tayyip Erdogan, exigió crear una “Gran Turquía” que incluya el norte de Grecia y las islas del este del Egeo, además de Chipre y zonas de Armenia, Bulgaria, Georgia, Siria e Irak.
Külünk es una persona muy cercana al presidente Erdogan, y originario de la misma provincia que los padres del máximo mandatario otomano. El diputado del AKP solicitó desde la red social de Twitter una “Gran Turquía” que incorpore grandes áreas del norte de Grecia y las islas del este del Egeo, la mitad de Bulgaria, Chipre y Armenia en su totalidad, además de grandes áreas de Georgia, Irak y Siria. En una serie de tweets, Külünk elogió la victoria de Seljuk sobre el Imperio Bizantino en Manzikert en 1071, que permitió a los turco-asiáticos entrar en Anatolia por primera vez en la historia. “Turquía ha entrado en el siglo XXI con grandes movimientos con el espíritu de 1071, está progresando, dando grandes pasos. Hoy, la razón por la que el mundo occidental vuelve a nosotros es el despertar de una nación que se durmió después de 1938 el 15 de julio y se abrió a Siria, el Mediterráneo y África con su espíritu de 1071”, dijo Külünk en Twitter.
Haciendo referencia a este “espíritu de 1071”, Külünk podría haber admitido efectivamente que Turquía tiene como objetivo dominar militarmente Siria, el Mediterráneo y África. El político del AKP también resaltó que “los nietos de quienes piensan que nos sacarán de Anatolia están intentando sacarnos del Mediterráneo hoy”. “No tengas ninguna duda de que serán derrotados en el Mediterráneo. El espíritu de la victoria de Manzikert está vivo. El Gobierno de Turquía y la necesidad de satisfacer el espíritu de la nación en todos los campos», aseveró en Twitter. El tweet fue acompañado con un mapa de una extendida Turquía que muestra el norte de Grecia y las islas del este del Egeo ocupadas por la bandera turca.
A pesar de estas declaraciones expansionistas de este ideólogo de Erdogan, que pertenece al mismo partido político y es miembro del Parlamento, Donal Trump, presidente de Estados Unidos, y Alemania prosiguen con su actitud de no oponerse totalmente al país euroasiático. Mientras, apaciguan a Ankara a pesar de su postura beligerante contra Grecia, país con el que tiene un fuerte conflicto por la disputa de zonas económicas exclusivas en el mar Mediterráneo. El objetivo de la Turquía de Erdogan es posicionarse fuertemente en el arco del Mediterráneo oriental y hacerse con ricos recursos de gas y petróleo en la zona.
Recep Tayyip Erdogan fue nuevamente elogiado por Donald Trump, esta vez en un evento con un pastor estadounidense que fue encarcelado ilegalmente y tomado como rehén en Turquía durante más de dos años. «Tengo que decir que, para mí, el presidente Erdogan fue muy bueno», dijo Trump al pastor Andrew Brunson, quien afrontaba décadas en una prisión turca por orden del máximo dirigente otomano.
Kyriakos Mitsotakis, primer ministro de Grecia, mantuvo una conversación telefónica con el presidente norteamericano el miércoles por la noche, donde Trump solo pidió que las escaladas disminuyan como si Grecia fuera parcial o igualmente responsable de las acciones agresivas de Turquía.
Mevlüt Çavuşoglu, ministro de Asuntos Exteriores turco, amenazó al país heleno con el uso de la fuerza y señaló que la respuesta de Turquía no será accidental, sino una acción directa sin dudarlo. El diplomático otomano dijo que Grecia debía abandonar lo que denominó como «demandas maximalistas» en referencia al choque por determinadas zonas del Mediterráneo. Unas palabras pronunciadas con motivo de una rueda de prensa conjunta que dio en Ankara junto a Heiko Maas, ministro de Asuntos Exteriores de Alemania, quien intentó rebajar la tensión entre griegos y turcos haciendo un llamamiento al diálogo a pesar de las amenazas de la nación euroasiática. “Lo que sea necesario, lo hacemos sin dudarlo. Por lo tanto, no se agite, anime a estos países y actúe con sentido común”, dijo el ministro de Relaciones Exteriores de Turquía en su intervención junto al diplomático germano.
Alemania ha sido un aliado de los turcos durante mucho tiempo, de hecho, hay una importante población de origen turco en territorio alemán, y, por esta razón, no parece dispuesta a imponer sanciones a Turquía a pesar de sus constantes amenazas contra Grecia, miembro de la Unión Europea, y sus violaciones del espacio aéreo y marítimo del país griego.
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