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Autor Tema: 12 mil españoles sin papeles llegaron a la Venezuela prospera de los años 50  (Leído 1,718 veces)
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12 mil españoles sin papeles llegaron a la Venezuela prospera de los años 50
« en: 7 Marzo 2020, 15:11 pm »

¡Para no olvidar! 12 mil españoles sin papeles llegaron a la Venezuela prospera de los años 50

Más de 120 barcos canarios ilegales cruzaron el Atlántico entre 1948 y 1952 en búsqueda de una vida más próspera. Los últimos supervivientes relatan un viaje lleno de penurias, sin agua ni comida y a merced de los temporales.


El viaje a Venezuela costaba 5.000 pesetas, una fortuna en España

Es la misma historia que hoy viven muchos venezolanos en Europa y otros continentes, pero contada al revés. Tras una dura cuarentena en La Orchila, estos arriesgados españoles podía notar la recompensa en muy pocos meses. Era Venezuela el país "donde todo era demasiado barato".

Para llegar  a su destino, debían bordear la costa africana hasta Cabo Verde para luego proceder a internarse en el océano hasta pisar tierras venezolanas en búsqueda de una mejor vida.

Hace 65 años, pisaban mayormente  La Guaira y Carúpano, aunque también llegaron a Margarita y a Trinidad.

¿Cuánto tiempo? Era un mes de viaje que además costaba una fortuna para la época, 5000 pesetas.  Cada una de estas personas emprendía el viaje consciente de sus riesgos: Ser detenidos, pasar necesidades y hasta a merced de posibles tormentas que les jugaran en contra. Sin embargo, ellos sentían que valía la pena.

Sabían que pasarían trabajo, que casi siempre era suficiente para todos y que probablemente serían detenidos por la policía venezolana al llegar a tierra firme. Pero el riesgo valía la pena.

La dictadura de Francisco Franco en España atravesaba su peor momento y en Canarias no había trabajo, ni mucho menos dinero. Muchas familias vivían del autocultivo y también llegaron a pasar hambre. Ajena a esa realidad de profunda depresión y miseria, Venezuela era entonces un país en el que la prosperidad estaba garantizada.

Lo decían los primos, lo repetían los vecinos en las siete islas canarias. Apenas con un mes de trabajo, podían recuperar las 5.000 pesetas que debían pagar por el pasaje. El bolívar entonces tenía una cotización casi paritaria con el dólar estadounidense y la economía gozaba de un crecimiento interanual del 10%. Venezuela no era otra cosa que la tierra prometida y por eso los marineros y pescadores de las islas comenzaron a ver negocio en la organización de los viajes transoceánicos con hasta 200 personas a bordo de motoveleros.

Los viajeros embarcaban con comida y agua calculada para 30 días. Casi todos llevaban sólo una pequeña maleta. Después de más de un mes de travesía, durante la cual muchos de ellos llegaron a afrontar peligrosos temporales, llegaban a Venezuela, la tierra de la que todos hablaban en Canarias, el país desde donde los emigrados enviaban grandes cantidades de dinero a sus familias.

 El Gobierno venezolano entendió las ventajas de la mano de obra española, dispuesta a trabajar en los campos en los que no querían operar los campesinos nacionales. Por ello, firmó un convenio con el Gobierno del dictador Francisco Franco para permitir la inmigración legal a partir de 1952. Pero hasta esa fecha, la clandestinidad era el único camino para alcanzar tierra venezolana. Fueron más de 120 barcos los detenidos.

En Canarias se calcula que, por todas las vías, más de 12.000 canarios llegaron sin papeles a Venezuela. “Venían por los pueblos. Iban diciendo: pasaje a Venezuela por 5.000 pesetas. Allá consigues trabajo fácil y ya empiezas a mandar dinero rápido”, nos cuenta José Hernández, un canario que partió de La Gomera el 9 de agosto de 1950 en el barco El Telémaco hacia Caracas en conversación telefónica hace un par de años. José, con sólo 17 años, viajó con su padre y otros 169 inmigrantes.

“Mi padre vendió una finca buena que tenía. Le pagaron 10.000 pesetas. Y dio 5.000 por su pasaje y 4.500 por el mío”, recordaba José, el más joven de los tripulantes de El Telémaco, en diciembre pasado, en Los Teques, donde vivió gran parte de su vida.


La dictadura de Franco atravesaba su peor momento y en Canarias no había trabajo

Una dura travesía

 Santiago Jerez, patrón del barco, aceptó llevarlo a Venezuela a pesar de no haber surcado nunca el océano. Se guiaba por su instinto y por las pobres indicaciones que recibía de pescadores que ya habían hecho la misma travesía. Su sobrina, Teresa García, era la única mujer entre 170 hombres.

 A los 10 días de haber emprendido el viaje, una noche, una tormenta sorprendió a la tripulación. Teresa, también en conversación telefónica desde Caracas, cuenta la gran aventura de su vida a la que se sumó muy joven, poco consciente de los peligros que conllevaba cruzar el océano con tan escasos recursos. Pensaba que el viaje era mucho más corto y que se lo pasaría bien. Era la gran ingenuidad de quienes abordaron El Telémaco con muchas esperanzas y casi sin miedo.

 “Esa noche nos sorprendió una marea muy brava. Entraba agua por las escaleras. Con el temporal, no se podía ni ver la proa del barco. La gente se tuvo que refugiar en los camarotes. Las olas eran tan grandes que casi se llevaron a Cristóbal Suárez, que manejaba el barco, porque el timón estaba al aire libre. Los tripulantes tuvieron que amarrarlo para que el mar no se lo llevara mientras domaba ese barco”, recuerda Teresa desde su residencia en Caracas.


Los españoles tuvieron que atravesar duras calamidades

 La tripulación había llevado carne, patatas, arroz, garbanzos, gofio y bidones de agua dulce, pero casi nada sobrevivió al temporal. Entonces, el racionamiento que sufrían los tripulantes se hizo aún mayor. Uno de los viajeros de El Telémaco, Manuel Navarro, que años más tarde obtendría gran reconocimiento en La Gomera por el relato de su aventura, escribió unas décimas que recitaba de memoria durante muchos veranos a sus paisanos interesados por aquella aventura:

 “Seis patatas, no muy buenas, eran y no bien contadas, la comida destinada para el almuerzo y la cena, dejando profunda pena cuando fueron terminadas; pero en la desesperada, comimos sin poner freno gofio de gusanos lleno y platos de agua salada”.

Después de la tormenta, adquirió tintes de tragedia. Los tripulantes comenzaban a enfermar y muchos de los viajeros comenzaban a tener diarreas y a vomitar sangre.

Eran las consecuencias de la mala alimentación y la hidratación con agua salada. Cuando la situación comenzaba a ser trágica, El Telémaco vio la salvación. En medio de la ruta, coincidió con un petrolero que provenía de Venezuela. Hicieron señales de auxilio y gritaron por ayuda hasta captar la atención de la embarcación que les salvó la vida.

Les regalaron varias garrafas de agua. Sabía a agua limpia, pura, no como la que traían de Canarias que sabía a gasolina porque los bidones no habían sido bien lavados. Los tripulantes del carguero le indicaron al patrón, perdido y desorientado, la ruta hacia las Antillas. En pocos días llegaron a Martinica, donde los locales, sorprendidos por la aventura de aquellos españoles famélicos, acudieron en su ayuda. “Aquellos negros nos salvaron la vida. Se corrió la voz de que andábamos casi sin rumbo y que escapábamos de la miseria en España y llegó media isla a ayudarnos y a llenarnos de comida, de fruta y de agua”, recuerda Teresa desde Caracas.

 El final del viaje ya parecía garantizado, y El Telémaco surcó un mar mucho más calmado hasta llegar a La Guaira. Allí, como ya muchos esperaban, los tripulantes fueron detenidos. Los acusaron de tráfico ilegal de personas mientras que la mayoría de los pasajeros fueron puestos en cuarentena en la isla de La Orchila. El gobierno del dictador Marcos Pérez Jiménez se quería cerciorar de que ninguno de los famélicos inmigrantes portara alguna enfermedad contagiosa.

La prensa trababa las noticias en portada, “5 mil pesetas por venir a Venezuela pagaron 112 españoles a una organización fantasma”, publicaba El Nacional el 10 de enero de 1950 y “Con la libertad por brújula, popa a Franco y rumbo a Venezuela”, titulaba el mismo diario el 8 de septiembre de 1948.

Venezuela, “la octava isla”

Pasado el período crítico, todo resultaba muy sencillo en la Venezuela de aquellos días. “A mí todo me parecía baratísimo para la cantidad de dinero que se ganaba.

El país era inmensamente rico. Yo ahorré en muy poco tiempo 10.000 bolívares, que eran casi 200.000 pesetas, una fortuna en España”, cuenta Teresa. Una fortuna con la que su compañero de viaje José podía comprar 20 fincas en La Gomera. Algunos viajeros de aquellos barcos regresaron a su tierra después de haber acumulado una buena cantidad de ahorros.

A la vuelta, lograron construir una admiración colectiva en las Islas Canarias y si alguno regresaba tenía que recorrer todas las casas para contar la aventura. Eran los días en que Venezuela fue bautizada como “la octava isla”. Pero muchos otros como José Hernández y Teresa García, decidieron afincarse en Venezuela, formar sus familias y sus nuevas vidas. Fueron conquistados por aquella tierra moderna, en pleno desarrollo, y llena de gente amable, un país que, 65 años después, ya pocos reconocen.

Ahora sus hijos y nietos son quienes se marchan huyendo de las colas, la escasez y la inseguridad. En el fondo, es la misma búsqueda: de la libertad y la prosperidad que también perseguían sus abuelos. Ellos forman parte de la nueva generación que regresa a sus orígenes para recordar que la vida también es un viaje de ida y vuelta.

Así los recuerdan sus descendientes

Aunque muchos de estos valientes ya no están, sus descendientes los recuerdan con orgullo y hasta nostalgia al rememorar la Venezuela de aquellos años, país de esperanza y tierra de oportunidades para quienes, incluso, decidieron quedarse y hacer familia.

Compartimos este articulo de AlNavio.com en nuestras redes sociales y así reaccionaron quienes conservan recuerdos y anécdotas de familiares y amigos que sobrevivieron a esta dura travesía.

http://blog.cohenyaguirre.com/2017/11/para-no-olvidar-12-mil-espanoles-sin.html?m=1&fbclid=IwAR3tBXVR7X8jZFbY8sFkI-YtgJUbhiUFLHaDenAiHGT6V0hr9X7EK1VHiNg

 
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Re: 12 mil españoles sin papeles llegaron a la Venezuela prospera de los años 50
« Respuesta #1 en: 7 Marzo 2020, 21:54 pm »



Ahora los Venezolanos llegan a España...
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Serapis
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Re: 12 mil españoles sin papeles llegaron a la Venezuela prospera de los años 50
« Respuesta #2 en: 7 Marzo 2020, 22:42 pm »

Sí, es triste recordar que hasta los años 90, Venezuela era el país más próspero de Suramérica, con sólo dos moderados problemas: delincuencia y desigualdad social, para que luego Chávez (tras su intento fallido de golpe de estado y su posterior amnistía judicial), prometiera cosas que lejos de cumplirse ninguna han acabado arruinando al país al completo, ahora la delincuentcia (probablemente) sea 10 mayor, la corrupción política (que seguramente la habría  tiempso atrás y que era mínima), ahora es el modus operandi (que campa a sus anchas en el país)... y en lo que sin duda se ha mejorado es en la desigualdad social.

Antes, con la desigualdad social yacente habría (por ejemplo)
    03% ricos
    32%clase media
    50% clase baja
    15% bajo el umbral de pobreza...
Ahora la desigualdad se ha equilibrado bastante, la 'mejora' consiste en:
    01% ricos
    09% clase  media
    10%clase baja
    80% bajo el umbral de pobreza

Claro que nadie puede dar por aceptable equilibrar la desigualdad haciendo pobres a todos, si no más bien subiendo de peldaño a los que están más abajo, no bajando a los que están más arriba que es lo que han logrado hacer y es el resultado final del 'chavismo'.

El resultado es que un país que antes acogía emigrantes, es ahora el que está forzado a emigrar... Solo en España acoge ahora mismo a unos 134.000 emigrantes de Venezuela... a saber cuantos venezolanos hayan tenido que emigrar, peor de lejos  muchos más que los que emigraron de España tras una guerra (en Venezuela no hay guerra pero el resultado final parece más catastrófico que si la hubiera habido, salvo quizás las muertes que la ocasión hubiera generado).
https://es.statista.com/estadisticas/472512/poblacion-extranjera-de-espana-por-nacionalidad/

España  tiene ahora una población de inmigrantes de unos 4'5millones (según wikipedia). que representan aprox. el 10% de la población, pero solo contando aquellos que 'tienen papeles', la cifra será mayor considerando que es más que probable que haya otra cantidad (dato hipotético) similar sin papeles.

Solo en 2017, en España entraron unos 320.000 inmigrantes no pertenecientes a la UE (530.000 contando otros de la UE, como por ejemplo los procedentes de Rumanía que son del resto el mayor grupo), nada que ver con esos 12.000 que emigraron a Venezuela hace 70 años, a lo largo de una década.
https://ec.europa.eu/eurostat/statistics-explained/index.php?title=File:Immigration_by_citizenship,_2017_.png

La Historia inevitablemente tiene cambios, ...es muy triste cuando ese cambio es a peor, motivado por estupideces ideológicas...
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